
Shin’ichiro admiraba a Aoi, era una mujer poderosa que estaba en la línea de tener éxito como líder del Aikido Dojo. Él se esforzaba día a día para impresionarla y acercarse lo más posible a ella … pero ella todavía parecía tan lejana … Un día ella acudió a él con un problema, tenía problemas con los hombres y quería que él la ayudara a estar más cómoda dándole un masaje. De repente se encontró agarrándole el pecho … y Aoi comenzó a no verlo más como un amigo de la infancia … sino como un hombre … Contenido del trabajo Te lo diré en serio amor.